A nivel mundial, y entre los criadores y asociaciones de asnos y mulas y amantes de la especie en general, la Raza Asnal Catalana es bien conocida. No en vano ha contribuido a la formación y mejora de muchas de ellas. Los híbridos mulares, que con base catalana se producen, son muy reconocidos y gozan de gran prestigio en cualquier parte del mundo.

Sin embargo, y aunque parezca una paradoja, es a nivel local donde se requiere un mayor esfuerzo de divulgación, lógicamente en un ámbito distinto al de la cría. El objetivo económico-productivo de su crianza está pasando, de forma acelerada, a un segundo término, no garantizando por tanto el interés de posibles nuevos tenedores de individuos de la raza. Las razones o motivaciones lúdicas, de animal de compañía o de juegos, de elemento pedagógico y de reinserción social en ciertos centros, de transporte turístico y excursionista, de elemento limpiador de sotobosque y estampa turística –porque no- en municipios y aldeas turísticas, o únicamente de patrimonio cultural, está movilizando y cambiando, cada vez más, el perfil y los intereses de los nuevos propietarios. Por tanto, se hace indispensable el dar a conocer al gran público la existencia y la situación de la raza, pues serán ellos, de forma mayoritaria en el futuro, los principales valedores de la misma.

Únicamente a título de curiosidad, y sin querer darle ningún valor científico de tipo estadístico (el tamaño muestral lo componían tan solo 64 personas), queremos reseñar aquí, algunos de los resultados de una encuesta, realizada por unos alumnos de la Facultad de Veterinaria de Barcelona en el año 2000, como parte de un trabajo de la licenciatura. Tan solo, un 47% de la población, tenía conocimiento de la existencia en Catalunya de una raza asnal autóctona, y de éstos, un 50% eran profesionales con estudios universitarios. Con esto, únicamente queremos resaltar, la gran labor divulgativa que queda por hacer.

La existencia de una asociación como AFRAC, la reapertura, en el año 2002, del Libro Genealógico, y la instauración de un Programa de Conservación; con la identificación obligatoria mediante microchips, la identificación y caracterización morfológica, genealógica y genética, con las correspondientes fichas de los animales, y la base de datos asociada a toda esta información, son los puntales básicos que tienen que garantizar el mantenimiento y fomento de esta población. La seriedad y buen hacer en estas actuaciones ha de motivar, a los posibles nuevos propietarios, la tenencia, posesión y disfrute de un ejemplar de raza catalana. Los individuos, exhibidos en ferias, concursos y demostraciones, expondrán y manifestarán sus mejores aptitudes, ya sean morfológicas, de aptitud al trabajo, o de conducta, para mayor orgullo de sus criadores. Actualmente, y es una tarea que la asociación AFRAC tiene que plantearse para un futuro próximo, sólo existen tres concentraciones anuales de asnos en Catalunya. La primera, y más importante, es en la ya mencionada Feria de “Sant Martirià”, que desde el año 1978 viene celebrándose, ininterrumpidamente, en Banyoles a mediados de noviembre, con una finalidad expositiva y de concurso. La Fiesta de los Asnos (Fête des Ânes), que se celebra a mediados de septiembre, desde el año 1997, en la localidad francesa de Baillestavy (comarca del Conflent, Catalunya Nord), y dónde, de forma únicamente expositiva, se realiza una pequeña concentración de asnos catalanes. Y ya por último, y de muy reciente implantación (año 2003), la concentración y exhibición de asnos catalanes, en la Fira del Cavall (Feria del Caballo), que se realiza a mediados de mayo en el parque Central del Vallès, entre las localidades de Barberà y Sabadell (Barcelona).

Las ferias y concursos ayudan a la difusión y divulgación de la raza, y creemos profundamente que se tienen que potenciar. Sin embargo, también son necesarios y deseables otros mecanismos, que de una forma más directa incidan sobre el gran público -y no únicamente ganaderos y agricultores-, y expongan la problemática de la especie en general y de la raza en particular, para así concienciar a la gente y abrirles un nuevo abanico de posibilidades en cuanto a su utilización. La divulgación que se está realizando de la raza Catalana en la prensa escrita, la radio y la televisión (programas de TV3, “Veterinaris” y “El Medi Ambient”), creemos que ha sido importante, aunque lógicamente insuficiente. Divulgación más indirecta, pero igualmente importante; como puede ser la próxima publicación de un libro sobre todas las razas de asnos españolas (Edita, MAPA; Coordinador, José Emilio Yanes), dos de muy recientes sobre el Asno Catalán (Vilalta, 2005; Jordana, 2005), los de las razas domésticas catalanas (Parés y Vilaró, 1994; Parés y col., 2005), o artículos divulgativos del asno catalán (Francesch y col., 2002; Jordana, 2000, 2002a, 2002b; Jordana y Folch, 1998b, 2000; Servei de Producció Ramadera, 2003), así como, diferentes páginas web sobre este burro. Y tampoco nos hemos de olvidar de todo el movimiento de las “pegatinas”, de los coches y en otros productos, y de los viajes excursionistas del Sr. Antoni Valentí y su burra Havanera (Camino de Santiago y “Ruta del Guarà d’Ulldecona a Montserrat”), que tanto empuje han dado a su difusión.

Y ya por último, no queremos dejar de citar, por el gran trabajo que vienen haciendo en cuanto a la recuperación, difusión y divulgación de la raza, a las siguientes entidades: Finca Fuïves S.L., propiedad del Sr. Joan Gassó, y Centro de Reproducción Equina de Ecija (Sevilla), ambos ya citados anteriormente. A la Fundación Pirineos (Aldea Puy de Cinca, Huesca), y especialmente a su director Ricardo Azón, por mantener un importante núcleo de la raza y por la interesante labor cultural y pedagógica que hace con los mismos. Y a la ONG, Burros sin Fronteras, que en sus instalaciones, sitas en el Parque Natural del Garraf (Barcelona), y bajo el eslogan “Pongamos un burro en nuestras vidas. Salvemos al burro catalán”, intentan salvar de la extinción, de forma totalmente altruista, a los individuos de esta raza.